La de Vicente López



x Lucía Viera Rodriguez

Con la luz recién prendida, los personajes miran en silencio al público. Esperan o suplican algo, no se sabe bien. Esa escena que dura apenas unos segundos es una calma chicha antecediendo a la tormenta que irrumpe de pronto como una risa falsa, agujereando todavía más las paredes de la casa venida a menos.

Se trata de una cena cuasifamiliar de festejo de año nuevo, pero recién con el transcurrir de la obra es posible terminar de definir los lazos que unen a los personajes: una madre madura que exhibe sin tapujos su cuerpo, una hija religiosa y otro con discapacidad mental, un pintor que está instalado en su casa y la tía rica que viene de visita desde Vicente López con un amante uruguayo. De alguna forma, se podría decir que la obra pone en escena la complejidad de los vínculos y, en su entramado, se exponen las angustias, los reclamos pendientes, las envidias y los afectos.

El ambiente, que es al mismo tiempo cotidiano y seudo festivo, se cierra sobre si mismo ya que el único contacto con el mundo exterior es un teléfono que no suena y por el cual se intenta en vano establecer comunicación. El efecto cómico-patético de las escenas que varias veces promueven a la risa, comienza a disolverse en un estilo de comedia negra y paródica en la que los personajes muestran el reverso de toda fiesta familiar.

Ananá fizz en la mano, estos personajes conversan y se mueven de un lado al otro, burbujeando como la bebida que toman y, de vez en cuando, estallan. Hacen catarsis cada uno a su turno, tornando la situación más y más tensa hasta que incluso uno, espectador, tiene ganas de taparse los oídos y gritar basta. Cuando la secuencia termina, el personaje desaparece o se relaja y otro se encarga de empezar con las hostigaciones. Ningún estado emocional se explaya por este cambio de foco del conflicto, lo que hace que la tensión no caiga sobre un único personaje sino que los envuelva a todos como un manto.


Primer espectáculo de BAAL, el elenco de actores conformado y dirigido por Julio Chávez
Diseño de escenografía: Julio Chávez
Realización escenográfica: Marcelo Valiente
Diseño de Vestuario: Cecilia Allassia
Iluminación: Cristina Lahet
Asistentes de Dirección: Hernán Húbeli y Leandro Castello
Dirección: Julio Chávez.

"El Camarín de las Musas", Mario Bravo 960.
viernes y sábados 21 hs
Reservas: Teléfono 4862 0655.